martes, 28 de junio de 2016

Venidos a menos, viviendo del arte (y gracias por hacerme superar las 10000 visitas)



            ¡¡Hola perdid@s!!  En primer lugar quiero daros las gracias de nuevo, en esta ocasión por hacerme superar las 10000 visitas... ¡¡¡GRACIAS!!!  Parece que fue ayer cuando empecé con el blog, pensando que no le iba a interesar a nadie y... ¡sorpresa!  ¡¡¡Cada vez somos más "perdid@s"!!!

          En la entrada de esta semana voy a hablaros de un show diferente que pudimos disfrutar en el Teatro de las Esquinas de Zaragoza este fin de semana.  Se trata de Venidos a menos, dirigido por Miguel de Ángel, con Pablo Puyol y David Ordinas, un espectáculo de humor, entre musical y monólogo, de carácter absolutamente irreverente, que no te permite dejar de reír en ningún momento. 


            Era la segunda vez que disfrutaba de este show; la primera, en la desaparecida Sala Royal, quizá fue algo más intenso (la novedad, la sorpresa, la cercanía al ser otro tipo de local…) pero no por ello en esta ocasión me decepcionó, sino todo lo contrario.  Una escenografía sencilla (un cajón y unas cajas de cerveza apiladas a modo de asiento) y una guitarra nos reciben.  Un par de artistas, en forma de “diálogo musicalizado” nos cuentan sus andanzas y sus historias, con multitud de temas propios, escritos por los propios Pablo y David, interpretados como si de un concierto acústico se tratara, donde podemos destacar uno de sus mayores "hits", ese “Vivo del arte” que no podemos dejar de tararear…  Pero encontramos otros muchos temas, como “Venidos a menos”, “Pablo Puyol es gay”, “Las sevillanas del acto” o ese “Bis bis bis” con el que cierran la representación, y que como ellos mismos cantan “tiene efecto berbiquí, se te mete en la cabeza y ya no te deja…”, y prueba de ello es que llevo tarareándola desde el final del show!!!  Y no voy a contaros mucho más, que no quiero chafaros las sorpresas…

Foto:  Venidos a menos


            Con una enorme solvencia por parte de Pablo y David, curtidos en el mundo del musical (La bella y la bestia, Rent, Cats, Cabaret, Grease…) y de la actuación, tanto en teatro como en cine y televisión (recordemos que Pablo Puyol encarnaba a Pedro, uno de los principales protagonistas de Un paso adelante, entre otros), galardonados en varias ocasiones, se les nota muy cómodos con esta interpretación, pues son dos artistas, hablando de sus vidas, riéndose de ellos mismos y haciendo reír a todos los demás; y eso siempre se agradece.


            Estamos ante un espectáculo no recomendado para todos los públicos, con un “humor bestia”,  donde la cuarta pared teatral no existe.  Es un diálogo entre amigos, en el que el público aparece como un amigo más al que contar sus historias, con una enorme cercanía, interactuando con el propio espectador (incluso la primera vez que los vimos, fue el “perdido” que me acompaña “colega” en sus bromas en alguna ocasión), y haciendo que toda preocupación que puedas tener se desvanezca y sólo disfrutes y rías durante más o menos hora y media.  


            Así que si queréis disfrutar y despreocuparos durante un ratito, aunque os salgan algunas arruguitas de más por no parar de reír, no os lo penséis… acudid a su llamada cuando pasen por vuestra ciudad y no os arrepentiréis, risas garantizadas, pero abstenerse todos aquellos “tiquismiquis” que no tienen ganas de pasarlo bien…  Además cuentan con merchandising en sus “conciertos”, camisetas, tazas y cds para que no os olvidéis de este “show bestial y borrico”, como ellos mismos lo definen, ni tampoco de que ellos viven del arte (hasta que se harten)…  No os defraudará, es más, os encantará (como a casi todo el mundo que la ha visto), y si no, ya me contaréis… ¡palabra de perdida!



VENIDOS A MENOS

Dirección.- Miguel de Ángel

Reparto

David Ordinas
Pablo Puyol

Web: Venidos a menos   

martes, 21 de junio de 2016

No tengas miedo, sólo es un espectáculo (o de cómo pasarlo bien pasándolo mal…)



            ¡Hola perdid@s!  Esta semana vengo a hablaros de la tercera de mis obras objeto de deseo cuando fui a Madrid (tres obras en dos días, no está mal la media…).  Es sobre la última creación de Eduardo Aldán, No tengas miedo, sólo es un espectáculo, un experimento sobre el miedo que puede disfrutarse en el Teatro Infanta Isabel de Madrid hasta julio, de la mano de Aldan Company.  Tras el éxito de Espinete no existe, no me podía perder el último estreno que, seguro, dará mucho que hablar.  


            En esta ocasión, Eduardo Aldán nos plantea un experimento sobre el miedo, qué es el miedo, por qué nos atrae tanto esta figura, en definitiva, por qué disfrutamos pasando miedo, y lo hace en uno de los teatros con más historia de Madrid, el Teatro Infanta Isabel.  Como seguramente sabréis, este teatro, a comienzos del siglo XX sufrió un gran incendio que lo redujo a cenizas… hubo sólo dos víctimas mortales entre los miembros de la compañía y el personal del teatro, pero se cuenta que sus cuerpos no pudieron ser hallados entre los restos.  En la remodelación posterior, los obreros encontraron restos humanos que no iban a poder ser identificados, y por ello, puesto que su destino era una fosa común, para evitarlo y seguros de que eran estos dos miembros desaparecidos de la compañía, el arquitecto encargado de la obra decidió no sacarlos y edificar el actual teatro sobre ellos como homenaje, pues entendió que qué mejor sitio para descansar eternamente que el lugar de su pasión, de su éxito… Pero cuenta la leyenda que, desde entonces, cuando el teatro queda vacío, extrañas voces y presencias alteran ese silencio en las tablas…  

Foto:  Aldan Company


            Y es de aquí desde donde parte nuestra historia, con un enorme José Lifante, veterano actor sobradamente conocido por todos por sus interpretaciones en el cine español de terror, a modo de maestro de ceremonias que sirve de hilo conductor sobre este experimento de la mano de tres historias, reales, documentadas en nuestro país a lo largo del tiempo:  “La canguro” (con Patricia Delgado), “La pensión” (con Ricardo Mata) y “La subasta” (con Raúl Escudero); historias que te hacen disfrutar con el miedo, como nos gusta a la mayoría de los mortales.


           Una escenografía muy cuidada, un teatro repleto de leyenda, una acertada elección en las historias y en el modo de contarlas, acercan al espectador a esas situaciones de “miedo” para conocer cada una de nuestras reacciones, pero siempre sin dejar de disfrutar.  Maravillosa la interpretación de José Lifante, quien con una mirada puede llegar a asustar (como ya habíamos visto los que lo conocíamos), que con una maestría pasmosa lleva al espectador a indagar en cada rincón de sus miedos.


              Y no puedo contar mucho más… no quiero “destripar” ningún detalle… sólo os diré que tanto “el perdido” que me acompañaba como yo disfrutamos muchísimo en cada momento, desde el mismo instante que entramos por la puerta, y que si os gusta el miedo, como género, ese terror psicológico que te puede llegar a invadir, y disfrutar pasando ese miedo,  no os debéis perder esta maravilla de Eduardo Aldán, que apunta al camino de éxito de su predecesora, y que seguro que triunfa durante mucho tiempo como lo está haciendo ahora…


         Sustos asegurados, disfrutando de un concepto del miedo y de sus manifestaciones que os encantará.  Recordad, hasta julio en el teatro más encantado de Madrid, el Infanta Isabel; no os lo perdáis u os arrepentiréis durante mucho tiempo… ¡¡¡palabra de perdida!!!



NO TENGAS MIEDO, SÓLO ES UN ESPECTÁCULO
ALDAN COMPANY

Dirección y autoría.- Eduardo Aldán

Reparto:
José Lifante
Patricia Delgado
Raúl Escudero
Ricardo Mata




miércoles, 15 de junio de 2016

El padre, una "farsa trágica" con espíritu de thriller



            ¡Hola perdid@s!  En la entrada de esta semana quiero hacer referencia a la obra que pude disfrutar el pasado viernes, El Padre, de Florian Zeller, dirigida y adaptada por José Carlos Plaza, de la mano de Pentación Espectáculos en el Teatro Principal de Zaragoza.  Desde que vi que Héctor Alterio venía a Zaragoza me moría de ganas de poder verlo en directo, puesto que en El estanque dorado me fue imposible, y qué mejor que con una obra de este calado, una historia que nos desentraña una realidad dura con una gran elegancia y delicadeza que no deja indiferente a nadie.


            Nos encontramos con Andrés (Héctor Alterio) un anciano de mente confusa derivada de un principio de alzhéimer, que confunde realidad con ficción (o quizá no).  Andrés no tiene muy claro lo que está ocurriendo, si lo que le rodea es producto de su mente o es todo una “conspiración” para satisfacer los intereses de sus propios allegados, situación que podemos apreciar en la obra de manera nítida.  

Foto:  Pentación Espectáculos


Tras enfadarse con la enfermera que le cuidaba, nuestro protagonista se traslada a vivir con su hija Ana (Ana Labordeta) y la pareja de ésta, Pedro (Luis Rallo), que se encuentran en una situación de lucha personal por lo que quieren y lo que deben hacer…  Y es ésta vida la que da tumbos en la mente de nuestro protagonista, convirtiéndose en una historia de suspense, incluso de confusión absoluta de Andrés, pues llega a cambiar cara y cuerpo de su propia familia, lo que se manifiesta mediante la interpretación de los mismos personajes por otros actores (Miguel Hermoso y María González), ahondando aún más en esta separación entre la realidad y su percepción distorsionada de la misma debida a la senectud.  Además, toda esta confusión se refuerza con la figura de Laura (Zaira Montes) la nueva enfermera contratada por Ana, que lejos de aclarar las ideas de nuestro protagonista sólo le sirve para elevar el nivel de "desorden mental" en que se encuentra.


          Tratando un tema tan espinoso como el que nos encontramos, Zeller lo hace con una gran delicadeza, profundizando en la mente del protagonista, pues el desarrollo de la obra es visto desde sus ojos, poniéndonos en la posición de nuestro protagonista, Andrés, y haciéndonos reír y llorar a lo largo de toda la trama.


         Con una obra que parece haber sido escrita para él, nos encontramos con un magistral Héctor Alterio (siento si alguien piensa que soy algo parcial, pero todos conocéis mi predilección por esta familia) que siente como nadie la tesitura del personaje, profundizando al máximo en el mismo, transmitiéndolo al espectador y  llevando el peso de la función sobre sus hombros de una manera extraordinaria que lo deja agotado al finalizar la misma.  Mención también a una maravillosa Ana Labordeta en el papel de hija que nos muestra el sufrimiento y la lucha entre lo que quiere y lo que debe hacer, talento local que quizá debería estar más reconocido… sin dejar de mencionar al resto del elenco, un Luis Rallo muy solvente en su interpretación; así como Zaira Montes, María González y Miguel Hermoso, al que ya tuve la suerte de disfrutar en Don Juan Tenorio (la versión de Blanca Portillo), y que como siempre, nunca defrauda.


            Una obra dura, sobre un tema espinoso, tan próximo que a todos nos toca más o menos cerca, pero tratado con tal respeto que, a través del tamiz del humor, te hace apreciar la grandeza de las personas y, por qué no, también esos momentos en que el ser humano no es tan grande…  Una magnífica farsa trágica, como el propio autor señala… Una obra, como señaló la propia Ana “tiernecita”, puesto que lleva pocas representaciones, pero que no os debéis perder puesto que os calará hondo y os gustará, con enormes interpretaciones, 100 % recomendable.  Si podéis verla seguro que os cautivará, ¡palabra de perdida!


EL PADRE
de Florian Zeller 

PENTACIÓN ESPECTÁCULOS

Dirección y adaptación.- José Carlos Plaza

Reparto:

Andrés.- Héctor Alterio
Ana.- Ana Labordeta
Pedro.- Luis Rallo
Hombre.- Miguel Hermoso
Laura.- Zaira Montes
Mujer.- María González

Web.- El padre